Hace algún tiempo,
cuando la Sra. Aguirre anunció su dimisión y salida de la política dije: “no lo
creo, es una retirada para coger impulso”. No me equivoqué.
Como muy bien saben,
dijo que quiere ser candidata a la alcaldía de la Villa, a su manera, dibujando
curvas, pero eso es lo que hay, y no piensen que ese es su objetivo fundamental.
Su principal aspiración es mover la silla de Mariano y aspirar a la Moncloa. No
fue capaz de digerir el congreso de Valencia y está agachadita, para dar el
gran salto. ¿Podrá?, ya veremos. Este país es imprevisible.
No hay duda de que este
personaje siempre fue un dolor de muelas para Mariano y alguno más dentro del
partido, ahora le acaba de colocar otra patata calentita para endulzarle el
turrón. ¿Qué hará Mariano? Tal vez lo habitual: ni una cosa, ni la otra, ni
todo lo contrario; esperar que bajen los decibelios. Aceptar ese envite es un riesgo, no aceptarlo, quién
sabe si mayor. En cualquier caso, Mariano se juega mucho en las municipales
madrileñas y haga lo que haga, es un lío. Dirá lo que tenga que decir, pensará
lo que no dice y ese es el panorama.
Centrándonos en la
candidata, lo primero que se me ocurre es lo siguiente: una mujer que lleva
toda la vida en esto, populista mayor del reino, con toque salsa rosa, que dice
populistas a los demás; rodeada de golfos y corruptos por doquier, que dice ser
quien lo persigue y se atreve a buscar en el baúl ajeno postales para decir corruptos
a los demás; miembro activo de una formación que habla de regeneración y
renovación y sólo se le ocurre postularse en primera persona, ¡menudo ejemplo
creíble de renovación y también de regeneración!
Granados, hombre de su
confianza, harto de impartir cátedra de conducta; también Beltrán Gutiérrez: ¿Les
suena el nombre? Hombre black que sale del partido nacional y es Aguirre quien
le da cobertura para que siga activo y vinculado.
Si esto fuera poco,
nada menos que Cospedal es quien pide explicaciones al PP madrileño. En fin, con
estos ingredientes los hermanos Marx harían una de sus mejores obras.
Si esta hipótesis se
llevara a efecto y esta Sra., consigue buen resultado llegaré a la conclusión de
que este país, inevitablemente no tiene remedio.
D. Robles
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