viernes, 18 de julio de 2014

ETA Y LA POLÍTICA

España es un país acostumbrado a sufrir la sinrazón de la violencia de una banda que dejó tras de sí conmoción, no sólo a las víctimas que la sufrieron en primera persona, también al conjunto de la población.

Un asunto tan serio como este, no se puede aceptar y consentir que alguien pueda hacer uso de ese estado de dolor y rabia esperando algún rédito, y también para generar animadversión hacia otros, como ocurrió siempre y curiosamente desde el mismo escenario.

Hoy día, después de unos años en los que parece que la banda al fin, asumió que el camino emprendido sólo conducía a ninguna parte y no quedaba otra salida que hacer lo que hicieron, dejar de matar, creo que era momento para que también los de siempre, dejasen de hacer uso del discurso recurrente de ETA, cuando se hace necesario desprestigiar a terceros.

Resulta indignante el momento actual. Un adversario, que no enemigo, entiendo, se le “combate” con argumentos, propuestas y uso de razonamientos, no con la dialéctica pueril que escucho a demasiados oradores de alcoba y escapularios sin monje; a no ser que carezcan de ellos y por tanto recurren a lo que vemos y escuchamos.
Siguen empeñados en hacernos creer que las esferas de poder están reservadas a los de siempre. Lamentablemente la siembra de barrizales, siempre produce algún efecto.

Creo necesario hacer un poco de memoria; esa memoria tan frágil que hace que olvidemos tan fácil,  lo que  implica a su vez,  que nos convencen de lo que interesa con suma facilidad.

Referido a ETA decir en primer lugar, que todos los gobiernos de la democracia mantuvieron contactos con esta organización y negociaron de alguna manera el cese de la violencia. Si alguien dice lo contrario, o no se enteró o  sencillamente miente y para quien no esté en disposición de aceptarlo, recomendar un poco de serenidad y capacidad de análisis. Los hechos son los hechos gusten o no.

Ahora el ciudadano a cazar se llama Pablo Iglesias, y vuelve ETA desde el mismo altavoz, el sector más conservador; sea político,  mediático, o social.
 No escuché a nadie  poner en boca de Iglesias la condena a la violencia de ETA; es curioso, porque si lo dijo y lo afirmo porque lo escuché, sin embargo todo cuanto se divulga pretende acercarlo tanto a esa banda que incluso hay quien asegura que era o tal vez siga siendo su hombre en Madrid, ¡ahí es nada!  
Nadie mostró hasta la fecha una sola prueba no manipulada que pueda demostrar las acusaciones de que es víctima este joven. Pero lo importante es sembrar barro que algo siempre queda. El tiempo suele colocar a cada cual en su sitio, sólo que a veces en política ese tiempo llega tarde.

Se le acusa de haber mantenido contactos y hablar con el entorno de la banda.
 Sí le escuché decir que participó en algún acto público, con miembros de otros partidos, en los que también estaban representados  los llamados grupos pro etarras; lo dijo, no lo negó.

Pregunto: si es así ¿Dónde está el delito? ¿Lo fue las conversaciones mantenidos por nuestros gobernantes con ETA?  Éstas si fueron bilaterales, o ¿Por qué lo uno sí y lo otro no?
Mientras unas eran públicas, otras pretendían ser secretas.

Un poco de historia:
Los días 12 y 13 de mayo de 2005 Rodríguez Zapatero, en sede parlamentaria expuso su intención de hablar con la banda, cuyo objetivo no podía ser otro que dejara de matar. El Parlamento dio su aval y a partir de ahí no creo necesario abundar en el caso.
Por cierto, en su legislatura ETA dejó de matar, tal vez habrá quien lo haya olvidado y quiero pensar que no haya alguien que no se hubiese alegrado.
R. Zapatero fue el único que dijo abiertamente que pretendía hablar con ETA. Sus antecesores lo hacían a la vez que lo negaban.
El entonces jefe de la oposición, Mariano Rajoy, montó los furibundos ataques ya clásicos en esa formación haciendo uso de un discurso más propio de un fundamentalista que del  hombre de Estado que se esperaba. Más teniendo en cuenta su experiencia e historia recientes como comento a continuación.

¿Qué hizo el gobierno del que formó parte el Sr. Rajoy?
Recordemos: Fue una época en la que el entonces Presidente J. M. Aznar decía cosas como “se dan las condiciones para iniciar conversaciones con el MVLN (Movimiento Vasco de Liberación Nacional), así se refería Aznar a ETA, época en la que también hablaba catalán en la intimidad ¿recuerdan?
Pues bien, dicho lo anterior procede aportar algún dato.

Contactos:
 Los emisarios por parte del Gobierno del PP a las conversaciones fueron: Javier Zarzalejos, Secretario General de la Presidencia, Ricardo Martín Fluxá, Secretario de Estado de Seguridad y Pedro Arriola, asesor personal de Aznar.

En una de las reuniones se dijeron cosas como “No venimos a la derrota de ETA” dicho por Zarzalejos ante Mikel Albizu Antza y Belén González Peñalba Carmen, el 19 de mayo de 1999 en la ciudad Suiza de Vevey. Es sólo una cita  para ilustrar este artículo. Esa reunión fue moderada por monseñor Juan Mª Uriarte, entonces obispo de Bilbao.  

Entre septiembre del 98 y septiembre del 99 el gobierno ordenó el acercamiento de más de 120 presos y permitió el regreso de más de 300 exiliados de la banda.
En diciembre del 98 Aznar anunció el traslado de 21 presos que cumplían pena en cárceles de Ceuta, Melilla, Canarias y Baleares. Era, según dijo el Presidente, para que estuvieran más cerca de la Audiencia Nacional.

A mayor ahondamiento, entre 1996 y 2004  fueron excarcelados 56 miembros de ETA, de los cuales 14 fue el Sr. Rajoy quien firmó su salida de prisión. No añado el nombre y apellidos de todos ellos puesto que me extendería demasiado, tampoco tengo inconveniente así como significar las penas a que fueron condenados, fecha de ingreso en prisión y también la de salida. El resto hasta los 56 se los reparten entre  Mayor Oreja (19) y Ángel Acebes (23). Alguno con penas centenarias.
Es significativo el caso del etarra Iñaki Bilbao, condenado a 52 años, excarcelado después de cumplir 17 el 28 de septiembre del 2000. Era Ministro de Justicia Ángel Acebes y de Interior Mariano Rajoy. El 21 de marzo de 2002 Bilbao asesina al concejal de Orio Juan Priede.

Expresiones de la época:
“Si los terroristas deciden dejar las armas, sabré ser generoso” (José Mª Aznar 3-3-98)
“Estamos dispuestos a hacer y afrontar el esfuerzo que nos corresponda” (José Mª Aznar 18-12-98)
“El Gobierno y yo personalmente ha autorizado contactos con el entorno del Movimiento Vasco de Liberación Nacional” (3-11-98)
“El Gobierno ha hecho un gesto (referido al acercamiento de presos) conforme a la voluntad y deseo  que llegue la paz” (Mariano Rajoy 26-12-98)

También hay que decir que todos los grupos de la oposición mantuvieron cierta discreción, como entiendo que procedía hacer.

Sin embargo son estas señorías y sus afines mediáticos quienes no se cansan de hacer uso perverso de los hechos y vociferar por doquier utilizando  las víctimas y todo lo que se mueve a su alrededor en claro uso y beneficio propio.

Llegado aquí, opino lo siguiente: Se podrá estar de acuerdo o no, compartir o no, los procedimientos utilizados por todos los gobiernos para conseguir un fin, acabar con ETA y el “cáncer” que nos lastró tantas décadas, pero creo que debemos hacer un esfuerzo por entender esos movimientos.
Lo que no puedo compartir, aceptar y tolerar es el uso público que se hizo, y por lo que parece se sigue haciendo de este asunto como recurrente, cuando se trata de “dar estopa” al adversario o a quien  puede molestar  (políticamente ).

Todas aquellas personas vinculadas o próximas al entorno conservador son muchos los motivos que tienen para guardar silencio cuando se habla de  ETA para criticar a los demás, sabiendo qué hicieron ellos cuando gestionaron el Gobierno.
Hechos de esta naturaleza no pueden encontrar justificación cuando los hace uno y crítica, censura y algarabía cuando los hace otro.

Pues bien, con todo lo que sabemos y también lo que no, me pregunto cómo es posible que esta gente (sean políticos, comunicadores u otros) tenga la cara tan dura y poca vergüenza para hacer lo que hacen, decir lo que dicen y seguir utilizando este recurso para tratar de desprestigiar a alguien.

No puedo finalizar este comentario sin trasladar mi solidaridad a Pablo Iglesias que, al menos hasta la fecha y por lo que veo, demuestra tener más coraje y dignidad que todos aquellos que pretenden demonizarlo.

                                                                        D. Robles

No hay comentarios:

Publicar un comentario